La Guardia Civil ha detenido a dos mujeres, I.S. e I.M. de 38 y 44 años de edad y nacionalidad rumana, por un delito de estafa con tarjeta de crédito.
Una de las detenidas aprovechó que estaba contratada como empleada de hogar en la vivienda del titular de la tarjeta bancaria para facilitar a la otra, familiar suya, todos los datos de la tarjeta con la que ésta última efectuó 11 cargos a través de internet por más de 3.000 euros y en apenas 24 días.
Una compra fue en una empresa de telefonía móvil y el resto en cuatro portales dedicados al juego y las apuestas.
La familiar manirrota vive en Consuegra y su ‘benefactora’ trabajaba en la casa del hombre estafado en la también localidad toledana de Villanueva de Bogas.