La Consejería de Sanidad ha dado por cerrado el brote de legionela detectado en la localidad ciudadrealeña de Manzanares, tras cumplirse dos meses desde la aparición de los primeros casos.
Así lo ha asegurado el director general de Salud Pública, Manuel Tordera, al corroborar que el brote se considera cerrado porque ya se ha superado en más de dos veces el periodo de incubación de la enfermedad (14 días), sin que hayan aparecido nuevos contagios desde el pasado 5 de enero. El brote afectó a 237 personas, permaneciendo todavía ingresado un hombre de 65 años en la UCI del Hospital de Ciudad Real, desde el pasado 21 de diciembre, donde permanece estable.
Plataforma de afectados
No obstante, la plataforma de afectados ha anunciado que la próxima semana presentará dos denuncias en los juzgados. Una, por parte de los familiares de los fallecidos y de los pacientes que han estado ingresados en la UCI y otra del resto de afectados que hayan estado hospitalizados en planta o recibiendo tratamiento en sus domicilios.
Las denuncias serán genéricas y sin acusaciones concretas, ya que todavía no se ha demostrado si el foco de contagio proviene de una fuente ornamental, con lo que el responsable sería el Ayuntamiento, o de la torre de refrigeración de una industria privada, en cuyo caso la culpabilidad sería de ella.
Asimismo, desde la plataforma se asegura que no son cuatro los fallecidos por este brote, como aseguran las autoridades sanitarias, sino cinco. Según este colectivo, el último fallecido ha sido un hombre de 84 años, que murió el pasado 14 de enero por una parada cardiorrespiratoria por “causa inicial o fundamental de neumonía por legionela”, según consta en su certificado médico de defunción.