La calle Ancha de El Romeral ha sido el escenario en el que ha caído un meteorito, así lo ha hecho saber Luis Tapia a la Guardia Civil. Lo mejor del asunto es que esta visita no ha causado daños personales, ni materiales, pues esta bola de fuego –que hizo su aparición a las cuatro de la tarde- cayó en un corral cercano a la casa de Tapia, situada en el número 45 de la susodicha calle Ancha.
Luis observó una bola de fuego que llovía en dirección a su casa y éste salió corriendo de ella, pero al final de desvió y aterrizó al lado. Eso sí, Tapia recuperó los fragmentos del aerolito, que son de distintos tamaños: desde la palma de una mano a una canica. Son rocas de color blanquecino, de forma irregular que simulan escorias de fundición.
Ha sido un conocido de Luis, Ángel Téllez –un astrónomo aficionado de Madridejos- el que ha dado a conocer el suceso. Comenta que Luis estaba asustado porque sintió un gran estruendo y eso que tiene problemas de audición. Los fragmentos recuperados se han entregado a la Guardia Civil y ahora se procederá a realizar una investigación científica.
