El juez decano de Talavera, Fernando Presencia, ha comparecido hoy ante el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Castilla-La Mancha como acusado de un presunto delito de prevaricación judicial, al sobreseer durante el periodo de instrucción la causa abierta contra el abogado talaverano Carlos Lucas por un accidente de tráfico.
Presencia ha negado durante el juicio que actuara de forma anómala en ese proceso, que él atribuye a “la inquina contra el abogado por parte de la Fiscalía de Talavera, enterándome después que era por un pelotazo urbanístico”. El juez decano insistió ante el TSJ que “actué correctamente, como en miles de casos más”, argumentando que vio el proceso como un “juicio de faltas”
Sin embargo, el letrado que hizo de acusación particular en el accidente en el que se vio implicado Lucas sí ha asegurado que presenció una reunión previa entre las partes, en la que percibió “una actitud totalmente anómala porque no estábamos en igualdad de armas”. En este sentido, los dos hermanos propietarios del bar que hay junto al edificio de los juzgados de Talavera han declarado que era habitual ver a Presencia con Lucas, aunque matizando que “aquí vienen todos los trabajadores de los juzgados”.
El fiscal general de Castilla-La Mancha, José Martínez, ha considerado que está “probado que hubo prevaricación” por la relación de amistad entre Presencia y el abogado que causó el accidente “como ha corroborado el dueño del bar y como lo prueba el hecho de que el propio Carlos ha reconocido que se quedó a dormir en casa de Fernando en un viaje a Valencia, que no era de trabajo”.
Por ello, ha ratificado la petición para Presencia de 18 meses de multa a una cuota diaria de 50 euros y 15 años de inhabilitación profesional. El abogado de la defensa, Marcos García Montes, ha pedido por su parte la absolución del juez decano de Talavera. De esta manera, el juicio ha quedado visto para sentencia.