El 16 de octubre de 2001 se ponía en marcha en Castilla-La Mancha el servicio de atención telefónica 1-1-2, un servicio que conecta con celeridad a la ciudadanía con los cuerpos y profesionales de intervención, como los sanitarios, los bomberos, la Guardia Civil, la Policía Local, la Policía Nacional, Protección Civil o con los agentes medioambientales, para comunicar incidencias de urgencia y emergencia y provocar su pronta respuesta y presencia en el lugar del suceso.
En estos quince años, la centralita del Servicio de Atención y Coordinación de Urgencias y Emergencias (SACUE) ha recibido más de 31 millones de llamadas, lo que supone una media de 5.900 llamadas por día.
Las necesidades sanitarias lideran años tras año las estadísticas de demanda de un servicio que está operativo las 24 horas del día y los 365 días del año.