La Policía Local de Talavera está actuando de oficio y denunciando a los vehículos que sin tener tarjeta acreditativa ocupan en los aparcamientos de los centros comerciales plazas reservadas para personas con movilidad reducida.
Si ir más lejos, durante el primer fin de semana de rebajas de este año los agentes talaveranos ‘recetaron’ 13 medicamentos a otros tantos vehículos por utilizar esas plazas que facilitan a los minusválidos su visita a estas superficies. La sanción se considera grave y puede alcanzar los 200 euros de multa.
El intendente de la Jefatura de la Ciudad de la Cerámica, Francisco Quevedo, refiere a Ahoraclm que el Cuerpo de la Policía Local tiene total legitimidad para multar. “Sí, son espacios de suelo de titularidad privada, pero están habilitados para uso público y por ello es competencia de las autoridades locales poder regular y sancionar irregularidades. Normalmente acudimos cuando la propiedad nos reclama sin embargo en fechas señaladas y de mayor afluencia de público actuamos de oficio para preservar esas plazas que cumplen una importante labor social”.
Quevedo apunta que la actuación de sus agentes puede tener lugar en superficie como en el parking subterráneo, donde las plazas están justo al lado de las puertas de acceso a toda la zona comercial.
Cabe señalar que no sólo los centros comerciales son susceptibles de una actuación policial en esta materia sino que, por ejemplo, en el Hospital Nuestra Señora del Prado también es habitual que los agentes locales talaveranos salvaguarden el cumplimiento de no ocupar las plazas de las personas con movilidad reducida, aunque también denuncian otros usos incorrectos como aparcar fuera de sitio o encima de la acera.
Sentencia en contrario
Sin embargo, la cosa no está tan clara y más tras la sentencia del juzgado número 1 de lo contencioso-administrativo de Barcelona que en febrero de 2016 dio la razón a un incívico ciudadano que fue multado por esta causa y reclamó. A pesar de que el magistrado reconoció en su fallo que era una infracción a la normativa y una conducta reprochable y reprobable, al ser suelo de titularidad privada y no ser vía pública, la Policía Local, en este caso la de Tarrasa, no tenía competencia ni potestad administrativa para multar a este ciudadano, curiosamente abogado de profesión.
La sentencia alude al Texto Articulado de la Ley de Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial (TALTSV) y al Reglamento General de Circulación para indicar que los municipios tienen atribuciones de ordenación y control del tráfico, y de parada y estacionamiento, “en las vías urbanas de su titularidad”. Sólo en esas calles, plazas y avenidas.
Vacío legal
Nada más conocerse este fallo, el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) giró un escrito a la Dirección General de Tráfico (DGT) para que interviniera y promoviese una reforma normativa nacional que acabase con “este vacío legal”. Una misiva que se envió el pasado mes de marzo y de la que Cermi confirma a este digital que “no ha habido novedades” al respecto.
Incivismo constatado
Durante la realización de este reportaje pudimos comprobar el incivismo que impera en Talavera. Sólo fue necesaria una visita a media mañana y entre semana a las dos grandes superficies comerciales de la ciudad para constatar que en las plazas reservadas para personas con movilidad reducida no se respeta su patente de corso.
En uno de los parkings en superficie de los cinco vehículos aparcados en ellas sólo uno disponía de su tarjeta de accesibilidad cuando la ocupación del mismo apenas alcanzaba el 20 por ciento. Para más inri fuimos testigos de cómo un ciudadano ‘válido’ aparcó sin miramientos mientras realizábamos el reportaje fotográfico.
En el parking subterráneo, igualmente semivacío, más de los mismo. Cuatro plazas reservadas, cuatro vehículos aparcados y sólo dos acreditados para hacerlo, con varias plazas universales libres a escasos veinte pasos.
En la otra superficie, que no dispone de aparcamiento subterráneo, encontramos un caso chocante y sangrante: las plazas de minusválidos han quedado capitidisminuidas por mor de una gran carpa que sirve para promocionar los productos del comercio en cuestión. Apenas han dejado a la vista y libres dos plazas, aunque cercenadas, con lo que la salida o entrada del vehículo para los legítimos usuarios de las mismas se dirime entre la imposibilidad y el riesgo al tener que utilizar en la mayoría de los casos la calzada para ello. Y adivinen…, sí, esas dos sui géneris plazas estaban en ese momento ocupadas por vehículos que carecían de la preceptiva tarjeta de accesibilidad.
Así las cosas, este incumplimiento de la norma, sea el suelo de titularidad pública o privada, sea susceptible legalmente de sanción o no, atenta contra un importante colectivo que ya tiene suficientes barreras arquitectónicas en su cotidianidad como para tener que encontrarse con sus plazas reservadas ocupadas por un incivismo y una falta de empatía que afortunadamente sólo lo representa una minoría en la sociedad. O eso quiero pensar.
El intendente de la Policía Local de Talavera asegura que sus agentes seguirán multando para intentar corregir estas conductas “y el ciudadano que no esté conforme con la sanción está en su derecho de realizar una reclamación”, concluye Quevedo.
Estoy de acuerdo con ello pero también multan a quienes tenemos la tarjeta q acredita q tenemos discapacidad. A mi me ha sucedido en el hospital q,teniendo puesta la tarjeta q dice q tengo un 53℅ d discapacidad,me puso un agente una multa por aparcar en zona reservada a discapacitados,la he recurrido por su puesto. Y en el aparcamiento del Carrefour me puso alguien un papel diciendo q respete la zona d discapacitados con mi tarjeta puesta. Parece q solo quieren q aparque en esa zona las personas q van con silla d ruedas o muletas cuando,los q tenemos discapacidad aunque no usemos esos artículos,muchas veces no podemos andar tanta distancia como hay si aparcasemos en zona “normal”. Si tenemos la tarjeta q indica la discapacidad q tenemos q nos respeten todos.