Talavera ya está inmiscuida en la Semana Santa, tras celebrarse ayer tarde el pregón que oficializa la apertura de una de las fiestas con más arraigo y multitudinaria de la ciudad.
El honor de este año ha correspondido al ministro del Interior Juan Ignacio Zoido, que pronunció en el Teatro Palenque un pregón en el que dejó patente su fervor por estas celebraciones como nazareno en su tierra, Sevilla, y con sus vivencias castellanomanchegas y, por ende, de Talavera cuando representaba a la máxima autoridad del Gobierno de España como delegado en la región.
Antes de su oratoria, Zoido cursó visita al Ayuntamiento de Talavera donde firmó en el libro de honor, recibió el característico bastón de mando con empuñadura de cerámica, para luego inmortalizar su visita en la tradicional foto de familia en la puerta noble del consistorio junto a una amplia representación de la corporación municipal, encabezada por su alcalde, Jaime Ramos, y el delegado del Gobierno, José Julián Gregorio.