El último día del mes de agosto se aprobarán los presupuestos regionales fruto del renovado acuerdo entre PSOE y Podemos. Esto significa que la política en Castilla-La Mancha toma otra dimensión y que Emiliano García-Page se ha doctorado como estratagema superior. Hasta ahora a García-Page se le quería ver como un político con suerte, se le acusaba con cierta maldad de haberse criado a los pechos de Pepe Bono y de haber conseguido auparse a la Alcaldía de Toledo con cierta fortuna, pero con este acuerdo para aprobar las cuentas ha demostrado que es un político de altura.
Y lo ha hecho días después de significase, erróneamente, en las primarias del PSOE. Ya se dijo, hace unas lunas, en este mismo balcón que la ruptura escenificada por Podemos le podría dar los mismo dividendos a los socialistas que ya obtuvieron en Andalucía cuando IU rompió con ellos. Y, ahora, se ha confirmado. Podemos no ha tenido más remedio que dar marcha atrás si quería seguir pintando algo en el panorama regional.
García-Page se ha llevado a su redil a José García Molina y lo ha hecho ante el estupor de Echenique y la Izquierda Anticapitalista, que no quieren ver al PSOE ni en pintura. Es más, hasta el otro parlamentario de la formación morada -el alcarreño David Llorente- no entiende cómo el secretario regional de su partido ha aceptado entrar en el Gobierno regional.
El derrotado en esta estratagema es el PP. En este asunto ha demostrado que está descabezado, que no se ha percatado de nada a la hora de jugar sus tiempos y no ha sabido negociar. Si hubiera ofrecido su abstención otro gallo le cantaría ahora y Podemos estaría poco menos que eliminado. El acuerdo escenificado por Page y Molina ha gustado en las alturas de sus respectivos partidos. Por un lado, Pablo Iglesias ha felicitado al segundo y acudirá al encuentro que hoy celebra en Carranque su Consejo Ciudadano Estatal con otra cara.
También ha bendecido este pacto Pedro Sánchez y ha comentado que ha estado debidamente informado de los pasos que se iban dando. No obstante, algunos ‘pedristas’ en la región apuntan veladamente que el PSOE debería de someter a opinión de sus militantes este acuerdo, algo que no se hará.
Empresarios y política
Los casos que se están juzgando en nuestro país y atañen a la política nacional muestran esa rara unión entre empresarios y políticos. Aquí, en esta toledana provincia, el líder de Imagina Podemos, Fernando Barrero, ha saltado al primer plano de la actualidad al denunciar el empresario Manuel Vázquez que le dio 6.000 euros para que la mujer de éste último Hedvig Vázquez Jaén, ocupara el número uno de esta corriente. Al final, da la impresión que ha sido un pequeño lío entre un matrimonio que se estaba disolviendo.
Otro empresario que está señalado estos días –tal y como publica El Mundo– es Ignacio López del Hierro, exgobernador civil de Toledo y marido de María Dolores de Cospedal, la presidenta del PP regional, secretaria general de este partido y ministra de Defensa. Y es que la Policía Judicial se reafirma ante el juez José de la Mata en todos los informes realizados en el marco del ‘caso Pujol’ en los que incluía a Ignacio López del Hierro y se niega a realizar rectificación alguna.
El comisario jefe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (Udef) ha remitido un informe a la Audiencia Nacional en el que sostiene que las “atribuciones” realizadas a López del Hierro “se encuentran debidamente contrastadas”.
Además, reitera la vinculación del empresario con la sociedad Ibadesa Cat, utilizada por la familia Pujol para cobrar comisiones y añade que en esta compañía “habrían estado representados sus intereses” y los del primogénito del clan catalán.
Este pronunciamiento de la Udef tiene lugar después de que López del Hierro remitiera una batería de documentos al Ministerio del Interior para aclarar su participación en la referida sociedad.
La queja de López del Hierro estuvo acompañada de otra cursada por el ex ministro de Trabajo, Manuel Pimentel, al que también la Policía ligaba a la trama de la familia Pujol en uno de sus últimos informes. Ambas reclamaciones provocaron, tal y como adelantó el diario madrileño, una auditoria interna para revisar los trabajos de la Udef en este asunto.
Fuentes del entorno del marido de Cospedal -que han sido consultadas por este periódico- recalcan la “extrañeza que les causa la insistencia de la Udef”. Máxime cuando consideran que López del Hierro ha demostrado que “no llevó a cabo ninguna actuación en esa empresa”. Esa “insistencia sin pruebas”, añaden las mismas fuentes, “lleva a pensar en que hay una mano negra política” que enmarcan en el bando contrario a la ministra de Defensa en el seno del PP y que tiene como objetivo poner en marcha “una campaña de desprestigio por el mero hecho de estar caso con María Dolores de Cospedal”.
Talavera y los ministros
En la primera legislatura que gobernó el PP –comandado por el recordado Pablo Tello- en la Ciudad de la Cerámica visitaron tres ministros esta urbe: Esperanza Aguirre, que ostentaba las carteras de Educación y Cultura; Mayor Oreja, Interior, y Álvarez Cascos, Fomento. La primera vivió una rocambolesca situación con la inauguración del Museo Ruiz de Luna, el segundo estuvo de paso porque iba a recibir un premio en Navalcán y el tercero prometió todo cuando Fepemta le entregó la medalla de oro de la organización. Promesas que se quedaron en agua de borrajas.
Desde que Jaime Ramos porta el bastón de mando de la ciudad se ha entrevistado con cinco ministros que se sepa: la ex de Fomento Ana Pastor; María Dolores de Cospedal, Defensa; Catalá, Justicia; Zoilo, Interior, y De la Serna, Fomento. Uno encuentros que, por ahora, no han dado el resultado apetecido. ¿Se volverá a repetir la situación de antaño?