El propietario de un chalet vacacional situado en una urbanización toledana no olvidará al ciudadano de nacionalidad extranjera al que le alquiló este mes de junio dicha vivienda y que no le pagó los 1.200 euros estipulados, no le devolvió las llaves y encima regresó a los pocos días de su marcha para llevarse la televisión.
El delincuente llegó a enseñar al propietario un recibo de transferencia del alquiler para tranquilizarle, recibo falsificado y nunca abonado.
El detenido estuvo ilocalizable hasta que acudió a los Juzgados de Toledo por otra causa pendiente, momento en el que fue acusado de un delito de estafa y otro de robo con fuerza.