El pasado 1 de febrero, acudí a la presentación del inicio, esbozo, esquema, del ‘Plan estratégico de competitividad urbana Talavera 2025’. Una llamada el día antes de Santi Serrano, viceportavoz del gobierno y nuevo Presidente del PP talaverano para convocarnos a la presentación del inicio de un ‘Plan’ sin habernos informado previamente, ni del documento ni del acto organizado.
Lo de menos es esa encerrona del alcalde para hacer partícipe a toda la Corporación (foto incluida) en un acto y un proyecto del que éramos ajenos. Ya sabemos los escrúpulos del Sr. Ramos y a una le puede la vergüenza, elegancia y educación en momentos como estos. Un escenario oscuro bajo el coro de El Salvador, concejales y periodistas convocados, equipo de gobierno en pleno con su alcalde a la cabeza. Poco más. ¿Para qué? Ah sí, se me olvidaba alguien que supongo es el responsable de poner en marcha este Plan por el módico precio de 56.000 eruos. Al menos podría haberse presentado y contarnos sus previas ideas para el futuro de Talavera. Total, estábamos en petit comité.
Un acto frío al igual que el comienzo de este febrero de rebajas políticas, en un gobierno de saldo quemando la enésima nave que garantice su supervivencia para mantener un poder que les permita seguir haciendo previos, anteproyectos e inicios de planes como estos, contratando a alguna consultora que te pone en bonito unas diapositivas con cuatro eslóganes para iniciar la precampaña y que el joven líder se presente en sociedad.
Les resumo: “ya era hora de tener un Plan estratégico”… llevan 7 años gobernando y se ponen ahora con ello. “Esto no es un proyecto del PP, ni de este gobierno, es de todos, de la ciudad, etc.”. “Esto empieza ahora, vamos a convocar a todo el mundo”, “tenemos que definir qué Talavera queremos, un proyecto de futuro y estratégico para la ciudad”. “Se harán mesas sectoriales con todo el mundo”. “En unas semanas empezamos y en mayo estará listo”.
Que Talavera necesita una estrategia de futuro es una obviedad. Que debemos apostar por un desarrollo sostenible y mirando a nuestro entorno, impulsando sectores productivos punteros y modernizar el sector primario también es algo en lo que estamos de acuerdo. Y que para ello es imprescindible contar ya, pero ya, con las infraestructuras estratégicas que siguen sin ejecutarse ni presupuestarse empezando por la modernización del tren convencional con mercancías, suelo industrial público y propio y la ampliación y modernización de regadíos, por poner algunos ejemplos.
Que Talavera consiga una estrategia de futuro depende del liderazgo y la credibilidad. Un Plan estratégico se elabora con la gente y no con una consultora. Y para empezar hay que dotar de credibilidad a quien lo impulsa. Y en esto ya tenemos escarmiento. Ahí tenemos los resultados urbanísticos del Plan Urban, el Proyecto Edusi, un invento de reparto de fondos europeos llamado ITI para lo que aún no hay ningún proyecto, y cómo olvidar el famoso Decálogo de Proyectos Irrenunciables cuya comisión de seguimiento no ha vuelto a reunirse. Por no hablar de la credibilidad que ofrece la gestión del día a día contraria a las estrategias esbozadas en el inicio del Plan.
La supervivencia del PP y de los que mandan es la ruina de esta ciudad y Talavera no puede condenarse para mantener el estatus quo de los de siempre. No estamos ante un último intento valiente y audaz por un proyecto común, arriesgando en el camino, quemando las naves para no volver atrás. No, no es Alejandro Magno en las costas de Fenicia. Es el Partido Popular quemando las naves para vender humo.
Sonsoles Arnao Carrera es Coordinadora Local de IU y portavoz de Ganemos en el Ayuntamiento de Talavera.
