Un paraje natural de El Piélago, en el término municipal de Navamorcuende, ha sido el escenario donde, a primera hora de este sábado, se han encontrado restos óseos humanos. Un hallazgo que se ha realizado muy cerca donde -en enero de 2016- se perdió la pista a Ángel López Barroso, un vecino de Navamorcuende de 46 años de edad, que salió a dar un paseo y nunca más se supo de él.
Aunque a la hora de redactar esta información no hay nada claro, la Guardia Civil sospecha que dichos restos pueden ser de Ángel López, algo que se sabrá a ciencia cierta una vez que se conozcan los resultados de la prueba del ADN.