Ha llamado la atención la fotografía facilitada por el Grupo Municipal Socialista donde se ve el radar móvil recientemente adquirido por la Policía Local de Talavera y que está siendo utilizado durante la campaña de control del límite de velocidad que se está desarrollando desde el lunes 16 y que finalizará este domingo 22 de abril.
Una de las patas del trípode que sujeta el cinemómetro, que mide la velocidad a la que transitan los vehículos y que como es habitual se camufla para no ser detectado a distancia, se encuentra en la zona de la calzada.
Aunque está más allá de la línea continua que no debe ser pisada por ningún vehículo, conductores de bicicletas y motocicletas sondeados por este digital entienden que representa un peligro para su integridad física.
Entre sus argumentaciones nos refieren que en no pocas ocasiones invaden ese espacio de la carretera cuando hay densidad de tráfico y que esa pata del trípode sí podría representar un peligro al ser un obstáculo imprevisto.
Por otra parte, varias de las localizaciones del radar móvil han sido desveladas y criticadas a través de las redes sociales durante estos días al considerar que el único afán de la campaña es recaudatorio. Otros muchos, por su parte, defienden este tipo de iniciativas porque potencian la seguridad de conductores y peatones y como muchos apostillan, “el que cumple con las normas nada tiene que temer”.