La cámara de Betis coloca hoy entre sus retratos de primavera a una actriz que fue considerada una de las musas de las tablas en aquella época en el que el teatro talaverano comenzaba a tenerse en cuenta. Se trata de Emilia Torrescusa, una profesora del colegio Fernando de Rojas que logró un premio nacional de interpretación cuando recorría España con el grupo de El Candil.
No sé si Miguel ha traído a este balcón a Emilia por su calidad como actriz, por su pasión por el teatro, por su faceta de madre ejemplar o por ser una persona que siempre ha defendido a esta Talavera de nuestros pecados. Lo cierto y verdad es que esta guapa mujer reúne todas las características necesarias para venir a este rincón.
Ahora, cuando Emilia se sienta en su casa a repasar instantes de su intensa vida, no puede olvidar cuando a los dieciocho años de edad debutó en El Candil interpretando a la María Magdalena de Proceso de Jesús, aunque ella disfruta más rememorando cuando fue la protagonista de Donde duermen las hormigas.
Además de actriz, Emilia también ha puesto voz en un coro rociero local; pero quizá de lo que se siente más orgullosa en cuando se encuentra con algunos de sus antiguos alumnos por las calles talaveranas y comprueba que, pese al paso del tiempo, la siguen llamando señorita Emilia.
Y es que Emilia Torrescusa vive esa etapa de las veteranas en la que belleza sigue reinando, que continúa derrochando la misma simpatía de siempre y que, por si fuera poco, rezuma amabilidad.
