Talavera cuenta desde este martes con un nuevo mural de cerámica, el primero de los dos que se dedicarán a las fiestas de Las Mondas, y que integra la que se ha dado en llamar ‘Ruta de los Murales‘.
La obra de Antonio García Cerro estuvo tapada en las horas previas a su inauguración por una gran bandera de Talavera de la Reina que fue retirada por el propio ceramista, por el alcalde de la ciudad, Jaime Ramos, y por dos representantes de la empresa que lo ha sufragado, Aqualia, su director en Castilla-La Mancha, Matías Loarces, y su gerente en Talavera, Arturo García-Barroso.
El nuevo mural cerámico, que se ubica en las escaleras de acceso a la iglesia de Santa Catalina (San Prudencio) desde la Ronda del Cañillo, tiene 20,20 metros de longitud y 3 metros de alto; está compuesto por 1.515 azulejos de 20 x 20 centímetros y su periodo de elaboración ha rondado un año y medio.
Sobre la temática del mural, su autor, Antonio G. Cerro ha señalado que se trata de un cuadro “atractivo y bonito, que está equilibrado, es simétrico y va desde la época de Ceres hasta la época moderna”. El ceramista ha explicado que en el centro está la Virgen del Prado, mientras que en el lado izquierdo está Ceres, con el rapto de su hija, y en el lado derecho, los desposorios de María y José”.
Este es ya el tercer mural que talaveranos y visitantes pueden contemplar en la ciudad, tras el recientemente inaugurado sobre la Hermandad de San Isidro y el que desde 2015 luce en la fachada del Museo Etnográfico sobre el río Tajo y los Pecadores, cuyo autor también fue García Cerro.