La Oposición ha solicitado de forma unánime la retirada de la propuesta de modificación puntual de la Ordenanza de Tráfico, circulación de vehículos a motor y seguridad vial presentada por el equipo de gobierno de Talavera.
Una modificación que pretende disponer de plazas de aparcamiento a las puertas de las farmacias y centros sanitarios de la ciudad.
Dos hechos han sido fundamentales para ello: uno, que la propuesta presentada no estuviera firmada por el concejal delegado responsable, como es lo normal, han dicho; y, el segundo, lo ha proporcionado el propio Jonatan Bermejo al desvelar que la Jefatura de la Policía Local lleva tiempo trabajando en la actualización de una ordenanza que data de 2003 -de la que toda la corporación coincide está obsoleta- y que espera que el texto esté finalizado “en septiembre u octubre”.
Preocupación
Esa aseveración del concejal de Seguridad Ciudadana ha propiciado que los portavoces manifestaran que ahora estaban más “preocupados” ante la urgencia llevada a este Pleno ordinario, y que no la entienden.
Así, el portavoz del Grupo Municipal Socialista, José Gutiérrez, se haya preguntado “qué presiones tiene el equipo de gobierno” para traer esta propuesta sin consensuar ni trabajar, “de malas formas”, cuando la actualización de la ordenanza en materia de movilidad y accesibilidad es tan inminente.
Sonsoles Arnao, portavoz del Grupo Municipal Ganemos Talavera, ha tildado de “ocurrencia a golpe de intereses sin saber de quién y cómo” y que “estas prisas no se sostienen”. Además, esas explicaciones de Bermejo le hacen pensar que hay más arbitrariedad de la que pensaba en un principio y que había denunciado este miércoles.
El concejal no adscrito Juan Pedro Ayuso, sin embargo, ha incidido en que la urgencia a la hora de comprar medicamentos es relativa, que puede entenderlo si el usuario tiene alguna discapacidad de movilidad y que estando la Policía Local en “escasez” esto supone mayor carga de trabajo. ¿Cómo se va a controlar?, ha preguntado.
Habrá parada en la estación de autobuses
Por su parte, Bermejo ha señalado que será una parada temporal -por lo que tendrá que reformar su propia propuesta ya que no se contempla-, que “es urgente” y no puede esperar hasta el próximo otoño.
También, ha recalcado que no ha recibido presiones de ningún tipo y que será la Policía Local la que las controle, al igual que controla la carga y descarga.
Asimismo, ha avanzado que la próxima ordenanza contemplará una parada en la estación de autobuses y en distintos centros donde la movilidad y accesibilidad sea necesaria por los usuarios que lo frecuentan.
La mayoría que ejerce en el salón de plenos el PP y los concejales no adscritos que pertenecían y fueron expulsados de Ciudadanos ha sacado adelante este modificación puntual.