Demarcación de Carreteras de la provincia de Toledo ha concluido con la retirada de las señales verticales de límite de velocidad de 100 km/h.
Esta mañana el subdelegado del Gobierno en Toledo, Carlos Ángel Devia, asistía a la retirada de la última señal toda vez que mañana 29 de enero, y tras un mes desde la publicación en el BOE y de campaña informativa, entra en vigor a todos los efectos el nuevo límite máximo de velocidad en carreteras secundarias o convencionales, que será de 90 km/h.
Acompañado por el coordinador regional de Tráfico, Francisco Javier Caparrini, así como agentes de la Guardia Civil de Tráfico y responsables de la Demarcación de Carreteras en la provincia de Toledo, Devia ha destacado “la importancia de la prevención para garantizar la seguridad vial en las carreteras convencionales”.
En aras de la seguridad
Los países de la Unión Europea con menores tasas de fallecidos por millón de habitantes en accidente de tráfico tienen, según datos del Ministerio de Interior, un diferencial de límite de velocidad entre vehículos ligeros y pesados, en carreteras convencionales, que oscila entre 0 y 10 km/h.
Según diferentes estudios, los vehículos que circulan a velocidades dispares de la media de la vía, como pueden ser los camiones en relación a turismos y motocicletas, son más susceptibles de provocar un accidente, con una probabilidad seis veces mayor que si estos vehículos circularan a la media del resto de vehículos. Además, velocidades de circulación más homogéneas favorecen la fluidez del tráfico.