Milagros Hortolano tiene abierta desde hace dos meses una recogida de firmas en la plataforma change.org solicitando “justicia para Cristian”, su hijo, que perdió la vida tras sufrir un infarto mientras jugaba al fútbol.
El luctuoso hecho tuvo lugar el 26 de enero de 2018, cuando Cristian Paniego, de 21 años, jugaba al fútbol en el polideportivo municipal de la localidad toledana de Corral de Almaguer.
Según el relato de la madre, su hijo se desplomó y empezó a sangrar por la cabeza. Sus compañeros acudieron al centro de salud del pueblo para pedir ayuda, pero los médicos les dijeron que no podían ir a atender a Cristian porque el otro equipo del centro había salido a hacer un servicio y no podían dejar el lugar desatendido.
A este hecho, que está judicializado y que considera “una omisión de medios materiales y humanos que contribuyó al fallecimiento de mi hijo”, además de una “injusticia y sinsentido”, se añade “otro sinsentido igual de importante: en el polideportivo existía un desfibrilador que podía haber ayudado a salvar la vida de mi hijo”.
Sin acceso al desfibrilador
Sin embargo, refiere, “el problema es que este aparato estaba cerrado bajo llave y quien tenía llave no se encontraba esa tarde en el polideportivo… sin que tampoco ningún trabajador municipal hubiera recibido la formación para su utilización”.
En este sentido, apunta que existen dos atestados -uno realizado por la propia empresa aseguradora Soliss, y otro por la policía municipal- en los que se señala que “de haberse tenido acceso a ese desfibrilador se podría haber salvado la vida de Cristian”.
Milagros Hortolano entiende que “sobre esta presunta negligencia tiene responsabilidad moral el Ayuntamiento de Corral de Almaguer”, pero tanto la anterior mandataria como la actual no han asumido esa responsabilidad.
“Nos sentimos desamparados, hechos polvo. Por eso queremos pedir al Ayuntamiento de Corral de Almaguer que acepte su responsabilidad sin necesidad de que tengamos que ir a juicio y alargar este sufrimiento 2 o 3 años más.
Y es que en el caso de que el Ayuntamiento acepte su responsabilidad no le correspondería a éste sino al seguro hacerse cargo de la indemnización a la familia.
“Ningún dinero o indemnización podrá traer de vuelta a mi hijo Cristian, pero sí es importante enviar el mensaje de que los ayuntamientos son responsables de sus instalaciones y de la seguridad de quienes las utilizan.