Durante la madrugada de este viernes, se ha efectuado en Talavera la última fumigación en el entorno de la ribera del río Tajo y otras zonas verdes de la ciudad con el objetivo de erradicar la plaga de mosquitos (quironómidos).
Tal y como se explicó este jueves, desde el Ayuntamiento se están intensificando las labores de desinfección desde hace varias semanas, que se pueden evidenciar con las nuevas actuaciones que continuarán en los próximos días.
La empresa adjudicataria del servicio ha procedido a desarrollar esta tarea contando con la colaboración de la Policía Local de Talavera.
Desde la Concejalía de Ciudad Saludable también se ha agradecido la buena disposición de varios locales hosteleros de la zona más próxima al río, que no han dudado en colaborar con el cierre de los establecimientos para facilitar y agilizar el desarrollo de la desinfección.
Desde el mes de marzo ya se han llevado a cabo un total de seis fumigaciones en la ciudad, cifra que seguirá incrementándose en los próximos días y se complementará con otros tratamientos que, además, serán más efectivos con el desbroce que ya se está ejecutando en la zona.
Desbroce de la ribera del Tajo
Tal y como explicaba la regidora talaverana, Tita García Élez, desde esta Concejalía se ha recordado que, a través del área de Política Medioambiental Sostenible, se ha procedido al desbroce y limpieza de las riberas del río durante esta semana y la próxima, una tarea que facilitará el acceso a zonas donde se encuentran los principales focos donde proliferan, mayoritariamente, los quironómidos.
La intención del Ayuntamiento es cambiar la hoja de ruta con la activación de un plan anual para la limpieza y desbroce de las riberas, una medida que se ejecutará durante las estaciones de otoño o invierno, para adelantarse en la prevención de posibles plagas en la época de la primavera y verano.
Como hasta ahora, se contará con el asesoramiento de colectivos medioambientales y técnicos del Servicio de Medio Ambiente, para tener las garantías de que se utilizan productos ecológicos y sostenibles que no afecten al río, su flora y su fauna.
El objetivo del equipo de Gobierno es paliar los efectos que producen estas nubes de mosquitos, tanto las molestias a la ciudadanía como entre los sectores de la hostelería o el comercio.
