El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha aprobado este martes un decreto para conceder de forma urgente y excepcional 235.700 euros a cuatro entidades que trabajan con familias de acogida, de modo que se puede agilizar la evaluación y en dos meses estas familias tengan la idoneidad para acoger a menores ucranianos o de otras zonas.
En rueda de prensa, la consejera de Bienestar Social, Bárbara García Torijano, ha destacado que en el mes de marzo la Dirección General de Infancia y Familia ha recibido 590 solicitudes de familias para acoger a menores no acompañados, más de la mitad de las cuales están dispuestas a acoger a cualquier menor, no solo procedentes de Ucrania.
Las cuatro entidades que recibirán esta subvención directa, urgente y excepcional ya trabajan en el programa de acogida en Castilla-La Mancha y son Colabora en Ciudad Real, Mensajeros de la Paz en Albacete, Acofam en Cuenca y Actia en Guadalajara y Toledo.
La consejera ha señalado que el Gobierno regional ha entendido necesario reforzar el programa de acogimiento familiar tras el aumento “significativo” de familias que se han ofrecido a raíz del conflicto de Ucrania, y ha incidido en la importancia de que las entidades puedan ofrecer a las familias información y formación para ello.
“Hemos observado la necesidad de priorizar la formación y la valoración de las familias para llevar a cabo un acogimiento de los niños y niñas y adolescentes del sistema de protección con todas las garantías”, ha indicado García Torijano, quien ha precisado que las familias que se han ofrecido a participar en este programa tendrán formación para dar respuesta a “otras crisis humanitarias o necesidades que tengamos con menores”.
1.077 menores tutelados
Según los datos que ha aportado, actualmente hay en Castilla-La Mancha 535 menores en acogida familiar, de los cuales 211 lo están en una familia ajena, y el total de menores tutelados es de 1.077.
La semana pasada comenzaron las primeras charlas informativas a familias que han presentado solicitudes de acogimiento y después de Semana Santa se iniciará el programa de formación con el objetivo reducir a dos meses, como máximo, el procedimiento de idoneidad, que habitualmente suele tardar seis meses de media.
La consejera ha señalado que el Ejecutivo regional ha entendido que se debían acortar los tiempos y tener una bolsa de familias formada para dar respuesta a la necesidad de acogida de menores no acompañados, aunque ha apuntado que en este momento en Castilla-La Mancha no hay ningún menor no acompañado procedente de Ucrania.
Por tanto, la formación intensa a las familias es una medida “previsora y preventiva” ante lo que pueda surgir, ha indicado la consejera de Bienestar Social.