Desde el inicio de la crisis sanitaria derivada del coronavirus, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha distribuido más de veinte millones de artículos de protección para los profesionales que desempeñan su labor en los centros del servicio regional de salud.
A lo largo de toda la semana se han repartido entre las diferentes gerencias periféricas un total de 279.600 mascarillas de distintos niveles de protección, 210.000 guantes, 9.400 batas de aislamiento reutilizables, 5.000 calzas, 3.000 gorros, además de 1.224 envases de solución hidroalcohólica, entre otros.
Además, se han repartido un total de 5.300 test de detección rápida del coronavirus que están siendo utilizados, entre otras cosas, para la realización del estudio de seroprevalencia que está llevando a cabo el Sescam entre sus profesionales, así como 8.100 hisopos con y sin inactivador.