Si yo les digo que el presente pisto manchego tiene entre sus ingredientes algo de tomate y pelín de cebolla, seguro que más de uno dirá que me habré quedado con los pies fríos y la cabeza caliente ante tamaña revelación. Normal.
Pues no se calienten los pies ni se enfríen la cabeza, please, porque resulta que el principal acuerdo al que llegaron los dieciocho gerentes sanitarios dependientes del Sescam en una de sus recientes y sesudas reuniones es, alucina vecina, gestionar “con humanidad” los centros hospitalarios de la región de los que son responsables. Con lo que, tú verás, sobran las palabras sobre cómo se han venido gestionando nuestros hospitales antes del decisivo acuerdo. Para mear y no echar gota, vamos.
Gota de cuyo itinerario no respondo, por cierto, si ustedes han utilizado alguno de esos 300.000 preservativos en mal estado detectados en el mercado, pertenecientes a una partida de profilácticos cuya destrucción fue encomendada a una empresa de Guadalajara, precisamente porque ni preservaban ni protegían. Menuda gracia les habrá hecho a algunos y algunas esta partida pirata de condones y quién sabe si de condenas.
Para enmarcarlos y exponerlos, junto a las ecografías de las humanas consecuencias, al igual que ha hecho la Sección de Nobleza del Archivo Histórico Nacional, con sede en Toledo, con los dos preservativos hechos hace nada menos que doscientos años con piel de cordero y encontrados entre la documentación del duque de Béjar al que, supongo que por causas algo más nobles, Miguel de Cervantes dedicó El Quijote. Vaya asco de reliquia que nos ha dejado, señor duque.
Reliquia en forma de preservativo de la que, según me soplan fuentes muy cercanas a los protagonistas, nada han querido saber la paisana Sara Carbonero y su marido portero Iker Casillas, como demuestra el feliz alumbramiento del segundo vástago de la pareja que responde al nombre de, hasta luego, Lucas.
Y mientras unos se multiplican, otros se dividen como han hecho el tenista y gentleman toledano Feliciano López y la modelo Alba Carrillo que, por lo oído, han roto su relación antes incluso de cumplir su primer año de casados. ¡Out!, dicen que ha dicho Feli.
Ese mismo y enérgico término ha gritado la ‘exbonita’ Ana Rodríguez, aunque sigue muy guapa, al romper también con el empresario mejicano Ernesto Manrique. Suelta doña Ana unas amarras a las que, ay, su ex Pepe Bono sigue atado como demuestra el fichaje de su hija Ana Bono por Iberdrola, la visita de nuestro impenitente líder a una planta de Etanol en Guinea, a saber pá qué, y la permanencia de su escolta cinco años después de dejar su actividad política, asunto este último duramente criticado por la Asociación Unificada de Guardias Civiles.
No puedo evitar la sonriente regresión mental que me producen los casos y casos de don Pepe. Regresión que, hay que ver, también he experimentado con el reciente baño en las aguas del Alberche por parte de su compañero, presidente de la Diputación y alcalde Escalona, don Álvaro Gutiérrez, para demostrar que el punto de baño de esa localidad es apto para el baño en contra de lo que dice al respecto la Unión Europea. Que me he ido, con perdón, hasta el baño de Manuel Fraga en Palomares hace ya la tira de lunas. Cosas de la mente, supongo.
Y, para terminar, dos curiosidades. La inclusión del genial pintor tomellosero Antonio López en las listas al Congreso del grupo Recortes Cero-Grupo Verde, que hasta ahora nada ha pintado en el parlamento nacional, y el récord mundial de personas haciendo flexiones a la vez que el próximo sábado se intentará batir en Toledo. Una pena para Talavera que sean flexiones, porque si fueran genuflexiones el récord sería, sin duda, para la Ciudad de la Cerámica. Otra vez será.