Tanto el entrenador del CD Toledo, el vallisoletano Onésimo Sánchez, como Joaquín Sorribas, director deportivo, están a la espera de que el Consejo de Administración del club haga frente a los problemas económicos –tras un mes y medio de impagos a los trabajadores- para comprobar si hay posibilidad de reforzar en el mercado de invierno la actual plantilla verde.
El cuerpo técnico está buscando un delantero –ya se apuntó aquí el ansiado retorno de Rufino-, pero como dice Onésimo “prefiero perder potencial a estar con gente que no pueda cobrar a fin de mes”. Esto significa que, si no se arregla la situación económica, el equipo puede perder efectivos para abaratar el coste de la plantilla. De hecho, varios futbolistas cuentan con ofertas de otros clubes. El CD Toledo ha invertido en esta plantilla un treinta por ciento menos que en la de la temporada anterior.