Los problemas de agarre de los neumáticos Michelín en el asfalto de Assem y la lluvia han sido los principales condicionantes del Gran Premio de Holanda, que se ha disputado por vez primera en domingo. El histórico circuito de Assem se ha convertido en una trampa difícil de superar para la mayoría de los pilotosde MotoGP, entre ellos el talaverano Alvaro Bautista, que se fue al suelo en la última vuelta cuando luchaba por ser quinto con el italiano Iannone, el mejor en su andadura con Aprilia de haber concluido así.
La de Bautista no fue la única caída de un Gran Premio muy accidentado, con climatología ambiante y que tuvo que detenerse a causa del aguacero a falta de 12 vueltas, reanudándose posteriormente y finalizando las mismas 13 pilotos.
Prueba de lo atípico del Gran Premio de este domingo, el vencedor final fue el australiano Jack Miller, con una Honda no oficial, segundo fue Marc Márquez y tercero Scott Redding, con Ducati. Mientras Valentino Rossi también abandonaba la prueba, la otra Yamaha de Jorge Lorenzo, vigente campeón y el otro gran aspirante al título, siempre rodó en posiciones muy retrasadas, finalizando en décima posición. Mientras, Dani Pedrosa fue el doce en meta.
La lluvia ha sido la gran protagonista de una carrera que se tuvo que interrumpir a 12 vueltas del final por la intensa lluvia que caía sobre el trazado de Assen. Las condiciones de seguridad aconsejaban parar la prueba y en la reanudación, las caídas han sido la nota predominante con hasta siete pilotos que se han visto obligados a abandonar.
Herrera fue la 14 y Simón 16
Los otros pilotos toledanos que participan en el Mundial de Motociclismo tampoco tuvieron un domingo excesivamente propicio. Al menos, en Moto3 la oropesana María Herrera, que partía desde la octava línea de la parrilla, pudo remontar posiciones y concluir en los puntos al ser decimocuarta en dura pugna con el belga Livio Loi, que entró en el puesto quince.
La benigna climatología comenzó a torcerse en la recta final de la prueba de Moto2, que tuvo que finalizar con dos vueltas de adelanto debido a la aparición de la lluvia. Cuando los jueces decidieron ondear la bandera roja, en la vuelta anterior había cruzado la meta en primer lugar el japonés Nakagami y Julián Simón el 16, puestos que resultaron definitivos.