El presidente regional, Emiliano García-Page, ha lanzado hoy un mensaje de optimismo sobre el futuro de la región y ha reclamado, “sin ningún tipo de odio ni rencor”, la unidad de todos los castellano-manchegos para “fijar objetivos colectivos” que “se reflejen en el bienestar”.
García-Page se ha pronunciado así durante su discurso en el acto institucional del Día de Castilla-La Mancha, en el Teatro Auditorio de Cuenca, donde ha asegurado que “los años que vienen serán buenos, extraordinarios” para la comunidad porque “los vientos soplan a favor”.
“Mi gran compromiso como presidente es aprovechar el viento como nadie”, ha subrayado el jefe del Ejecutivo autonómico, quien ha dicho que no quiere “el éxito de una parte de un rincón del país a costa del mal del conjunto”, lo que ha avisado, además, de que “es imposible”.
Con ello, ha defendido el diálogo como “instrumento de empuje”, “verdaderamente importante”, y ha recalcado que en dos años de legislatura han alcanzado 3.000 acuerdos “de todo tipo, de toda condición”.
A su juicio, “en tiempo de dudas es mejor escuchar” y, en este sentido, ha admitido que “hay problemas”, pero ha considerado que “el 90 por ciento de soluciones a los problemas los da la gente que los tiene”.
“El diálogo, el escuchar, es el principal instrumento que tenemos para sentir legítimamente optimismo”, ha aseverado el presidente autonómico.
Objetivos
En Castilla-La Mancha se están cumpliendo los objetivos “por encima de la media”, en economía y empleo y en reparto social, ha expresado, convencido de que “diálogo, limpieza, crecimiento, empleo, igualdad y cohesión” son un todo que “nos ampara y nos permite ser optimistas”.
El presidente ha expresado su orgullo porque en Castilla-La Mancha no se ha encontrado “ni un milímetro de resignación” con gente “que se alegran de que las cosas vayan bien”, extendiendo esta idea a España, que ha sufrido que sus “costuras periódicas se han roto en el devenir de la crisis y a propósito de la crisis”.
En este punto, ha ofrecido la “lealtad absoluta” de Castilla-La Mancha “para mantener la igualdad” de territorios en España apelando a que la sociedad mantenga los “objetivos colectivos” y no dude de ellos. “Necesitamos personas que representen luces en el devenir proceloso”, ha afirmado.
En referencia a la crisis, ha recordado que se cumplen diez años de su inicio, y que si alguien “está pensando en otoños calientes” y en “tensionar” la situación entre los españoles, “lo único que queda es el calor de estar juntos”.
Finalmente, y en unos tiempos donde mucha gente reclama a los políticos que pongan “freno a los obstáculos”, ha apostado por “superar los molinos, que eran gigantes”. “Si en todos los sitios reclaman que haya más quijotes, nosotros podemos no solo tenerlos sino presumir de haberlo intentado”, ha indicado, seguro que de que existen “muchos” motivos para la esperanza.