Las 24 viviendas de los peones camineros de la calle Capitán Cortés y las 27 del polígono Los Turieles, que la Junta de Comunidades acordó ceder al Ayuntamiento de Talavera para que éste las dedicase a alquiler social para jóvenes y/o para familias necesitadas y desahuciadas, a través de una moción de Ganemos, no cumplirán esa función puesto que todo apunta a que serán demolidas.
Así lo ha desvelado sorprendentemente esta mañana el alcalde de la ciudad, Jaime Ramos, quien a pesar de no haber recibido el informe de peritación sobre el estado de las mismas, que recordemos fue encomendado a los técnicos municipales hace ahora cinco meses, se ha aventurado a afirmar que ambas construcciones recibirán la catalogación de ‘ruina económica’, “por lo que cuesta más rehabilitarlas que demolerlas”.
En el caso de los tres bloques de los peones camineros, cuya valoración se cifró en 750.000 euros, principalmente por el solar en el que se encuentran, su antigüedad es notoria; sin embargo de las de Los Turieles se apuntó que eran de reciente construcción y que el deterioro se debía a los actos vandálicos y a los robos que habrían padecido y que su rehabilitación no sería muy costosa. Una rehabilitación que en su día se concretó la harían los trabajadores del Plan de Empleo en ambas edificaciones.
Ramos ha avanzado que en el caso de que se confirme la ‘ruina económica’ estudiarán con la Consejería de Fomento la formalización de un convenio para recepcionar el terreno previa demolición.