Unas 1.300 plantas de marihuana (cannabis sativa) así como 5 quilos de cogollos secos ya dispuestos y preparados para su distribución en puntos negros, más los útiles que se emplean en estos casos, ha sido la incautación realizada por la Policía Nacional de Talavera al desmantelar un centro de cultivo de marihuana.
Las investigaciones comenzaron después de que la policía tuviera conocimiento de la existencia de que un varón pudiera estar cultivando una gran cantidad de plantas de marihuana en varios inmuebles de un conocido barrio de Talavera de la Reina.
A medida que avanzaron las investigaciones, los agentes pudieron comprobar que efectivamente habría una persona que habría logrado habilitar un centro de cultivo con una producción repartida entre su propio domicilio y un segundo inmueble ubicado en un edificio de viviendas que en su mayor parte se encuentra okupado ilegalmente.
La fase final de la operación tuvo lugar el pasado 15 de noviembre culminando con la detención del presunto autor y el registro de los dos inmuebles, desmantelándose el centro de cultivo.