La totalidad de la corporación municipal del Ayuntamiento de Talavera de la Reina ha rechazado hoy de manera unánime, en sesión plenaria, el trasvase Tajo-Segura y más concretamente la última derivación de agua aprobada el pasado 10 de diciembre, que asciende a 38 hectómetros cúbicos.
Los integrantes de todas las formaciones políticas representadas en el consistorio talaverano han condenado esta circunstancia a través de una declaración institucional que ha leído el alcalde, Jaime Ramos, bajo el título ‘No nos rendiremos. Por un río Tajo y Alberche vivo’.
El texto ha arrancado con una alusión al último trasvase, que, según el manifiesto, “representa el agua que puede consumir la ciudad durante seis años y que, además, no es necesario porque en la cuenca del Segura sobra líquido elemento para regadío y consumo humano”.
La declaración ha continuado con la advertencia de que Talavera seguirá exigiendo justicia en materia de agua “gobierne quien gobierne”, y ha pedido “respeto para nuestra tierra y nuestros ríos” que, tal y como refleja el texto, han sido “expoliados”.
La nota leída por Ramos también hace alusión a que el municipio talaverano es la población española “más perjudicada por la nefasta gestión hidrológica de las últimas décadas”, circunstancia motivada por “pactos que siempre benefician a los que más tienen”.
Igualmente, el manifiesto subraya que los últimos 38 hectómetros cúbicos trasvasados al Segura son “38 bofetadas a la justicia, al sentido común y a la dignidad de todos los talaveranos”.
Y concluye: “No bajaremos el tono, ni callaremos ni nos callarán, porque jamás nos rendiremos hasta que traigamos de vuelta a nuestro río Tajo”.
La propuesta ha sido llevada a la sesión plenaria por Ganemos Talavera y ha contado con el respaldo de los concejales no adscritos, PP y PSOE.