Dicen que después de la tormenta viene una calma que, sin embargo y ciñéndonos al aspecto competitivo, el CF Talavera no encontró en el ‘Álvarez Claro’ de Melilla, donde cayó por un gol en propia puerta de Madrigal, para más inri, tras un desplazamiento que se convirtió en una auténtica odisea por las adversas condiciones meteorológicas que retuvieron a la expedición blanquiazul en Málaga, donde pernoctaron, sin poder volar a la ciudad melillense hasta esta misma mañana.
Así pues y debido a ello, lo que tenía que haber comenzado a las 12,00, se retrasó hasta las 20,00 y acabó hacia las 21,04, que fue cuando Madrigal introdujo el balón en su propia portería tras el saque de un córner por parte melillense. Antes, y mucho más después, el CF Talavera lo intentó, aunque nunca pudo, frente a un conjunto local mucho más intenso, a veces hasta pasarse, peligroso y afortunado.
En el primer asalto, los blanquiazules comenzaron asustando a la parroquia melillense con un envenenado centro de Christian que a punto estuvo de colarse en la portería local, pero no al once de Luis Carrión que comenzó a estirarse y a soltar latigazos como el de Óscar García, que neutralizó Gianni con los pies, o el de Taoré a cuatro minutos del descanso tras una gran jugada individual, aunque finalmente su disparo cruzado salió lamiendo el poste de la portería talaverana.
Reinicio nefasto
En esta dinámica, el cerocerismo mandaba en el descanso y en el inicio de una segunda mitad nefasto para los de Fran Alcoy, ya que tan sólo se habían disputado cuatro minutos de juego cuando Madrigal, aunque el local Herber celebró el tanto como suyo, introducía el balón en la portería de su compañero Gianni tras un saque de esquina.
Un mazazo que los blanquiazules pudieron contrarrestar en dos cabezazos consecutivos de Oca, el primero desactivado espectacularmente por el portero local, Dani Barrio, y el segundo perdido junto al poste. Este lance animó a un conjunto talaverano que ofrecía buena imagen, pero que no fue capaz de culminar la faena en los metros de la verdad, en los que Reguera, Abel Molinero y Sedeño inquietaron pero no hirieron.
Y así, con dos buenas oportunidades locales para el 2-0, la calma la encontró un Melilla que sigue tercero a pesar de sus irregularidades competitivas y la tormenta se la quedó un CF Talavera que está a tres puntos del pozo clasificatorio y que tan sólo ha sumado ocho puntos de los últimos treinta y cuatro disputados.
LA FICHA
UD MELILLA: Dani Barrio, Pepe Romero (Jilmar, 46′), Chakla, Richi, Mahanan, Mario, Ígor Martínez (Ruano, 72′), Héber Pena (Brian, 80′), Óscar García, Menudo y Taoré.
CF TALAVERA: Gianni, Rubén García, Madrigal, San José (Sedeño, 84′), Reguera, Rodellar, Oca, Víctor Andrés, Laerte (Ismael, 67′), Abel Molinero (Espinar, 67′) y Cristian Fernández.
ÁRBITRO: Fernández Cintas, auxiliado por San José López y Rodríguez Morales, del Comité de Andalucía. Mostraron tarjetas amarillas a los locales Pepe Romero, Menudo e Ígor Martínez y a los visitantes Reguera y San José.
GOLES: 1-0, min. 44; Madrigal en propia puerta.
INCIDENCIAS: Municipal Álvarez Claro, de Melilla. Partido correspondiente a la Jornada 23 del Campeonato Nacional de Liga del Grupo 4 de Segunda División B.