La provincia de Toledo fue en 2018 la más afectada de Castilla-La Mancha por las agresiones a sanitarios, ya que contó con 271 del total de 627 agresiones registradas en el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, según los datos facilitados este sábado por el sindicato CSIF.
Con motivo de un curso de autoprotección realizado este sábado en Toledo dentro de la campaña ‘No más agresiones’, en el que han participado cincuenta empleados públicos, CSIF ha dado a conocer las cifras de agresiones registradas en el Plan Perseo.
Así, el pasado año se registraron 627 agresiones en el Sescam, 444 de las cuales fueron a mujeres, y Toledo fue la provincia más afectada, con 271 agresiones, de ellas 188 a mujeres. Además, el 91,5 por ciento de estas agresiones en Toledo fueron verbales, registrándose 14 agresiones físicas.
