El Gobierno de Castilla-La Mancha recurrirá el trasvase de 38 hectómetros cúbicos de la cabecera del Tajo al Segura para el mes de abril, porque “no respeta la prioridad de la cuenca cedente que se ha ratificado en las recientes cinco sentencias del Tribunal Supremo, que anulan parcialmente el Plan Hidrológico del Tajo”.
La consejera de Fomento, Agustina García Élez, ha manifestado que este recurso se presenta “para atender las necesidades hídricas de la cuenca receptora y, por tanto, sin respetarse una vez más y mes tras mes la prioridad de la cuenca cedente, como marcan la legislación y las sentencias recientes del Supremo”.
García considera que “en ningún caso se podrían trasvasar 38 hectómetros cúbicos, si se hubiera corregido el umbral del nivel 3 como consecuencia de la última sequía en la cabecera del Tajo, ya que las menores aportaciones en la zona de cabecera exigen elevar los recursos embalsados disponibles para atender los usos de la cuenca cedente con garantías”.
Los pantanos de cabecera a la baja
Además, ha señalado que los pantanos de la cabecera, Entrepeñas y Buendía siguen a la baja y han perdido en la última semana 5,76 hectómetros cúbicos; situándose en 594,92, el 23,62 por ciento de su capacidad total.
En este sentido, ha recordado que la Agencia del Agua de Castilla-La Mancha, ha planteado en un informe técnico la necesidad de elevar el umbral del nivel 3, que si se hubiera aplicado haría que el máximo trasvase posible hubiera sido de 20 hectómetros cúbicos al mes.
Por todo ello, el Gobierno de Castilla-La Mancha entiende que “el trasvase es ilegal” y va a recurrirlo, afirmando al respecto la consejera de Fomento que “es imprescindible hacer un cambio legislativo, derogar el célebre Memorándum y modificar el Real Decreto 773 que recoge las reglas de explotación y, por tanto, establecer cuál es la situación real del Tajo y lo que marca la Directiva Marco del Agua en cuanto a la prioridad de la cuenca cedente”.
Asimismo, considera necesario “ejecutar de forma inmediata las sentencias del Supremo e implantar un régimen de caudales ecológicos en el Tajo”, advirtiendo que “si tardan mucho de forma injustificada, obviamente desde este Gobierno nos manifestaremos en contra de forma contundente”.
