La asamblea extraordinaria de Asaja de Toledo ha reelegido este martes como presidenta a Blanca Corroto, que continuará durante otros cuatro años al frente de la organización agraria, que preside desde hace ocho años.
Además, la asamblea ha renovado la Junta Directiva de Asaja de Toledo, que está integrada por tres vicepresidentes, un secretario general, un tesorero y catorce vocales, más cuatro vocales suplentes.
Los integrantes de la nueva Junta Directiva son agricultores y ganaderos socios que representan a todas las comarcas agrarias de la provincia de Toledo, ha apuntado tras su reelección Corroto, que ha añadido que en el órgano de gobierno de la organización se aúna veteranía y juventud y que cuenta con una mayor presencia de mujeres que las que había en la anterior.
Corroto ha agradecido el apoyo recibido durante los ocho años que lleva al frente de la organización y la confianza de renovarla en el cargo, al tiempo que ha hecho un llamamiento a la unidad de todos los socios y ha reiterado su voluntad de llevar a cabo una política de diálogo y de consenso tanto dentro de Asaja de Toledo como fuera de la organización.
Coordinación
En el acto de clausura, Corroto ha aprovechado la presencia del consejero de Agricultura Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, para pedirle que haya una mayor coordinación entre las direcciones provinciales del departamento en las cinco provincias de la región y que se unifiquen criterios y se cumplan las directrices para no generar agravios comparativos entre agricultores y ganaderos castellanomanchegos.
Por su parte, Martínez Arroyo ha dado la enhorabuena a Corroto por su reelección, así como a los integrantes de la nueva Junta Directiva de la organización agraria, en la que hay dos mujeres más.
Esta circunstancia ha sido calificada como “una buena noticia”, por Martínez Arroyo, que ha comentado que va a en la línea del compromiso del Gobierno regional, que ha aplicado desde el principio de la legislatura, “para que se visibilice las mujeres no solo en el campo, a través de las ayudas, sino en los órganos de dirección de las organizaciones profesionales agrarias y en las cooperativas”.