Los espectadores que se dieron cita en esta desapacible tarde del domingo en el Salto del Caballo pudieron comprobar que el CD Toledo sigue aquejado de su mal: la falta de pólvora. Y cuando un equipo no tiene gol, pues no consigue victorias. Así, ante el Guadalajara, los verdes cosecharon su sexto empate consecutivo y el tercero, también consecutivo, sin goles.
De nada sirvió que Manu Calleja se inventara como nuevo ariete a Mario García, pues el CD Toledo únicamente llevó peligro ante la meta alcarreña en jugadas de balón parado y gracias, sobre todo, al gran toque de balón que posee Álvaro Antón. Eso sí, Fran Montávez pudo anotar, pero su remate se fue al poste.
El Guadalajara, por su parte, se apoyó en su gran sistema defensivo para no encajar y, a veces, demostró que pone en práctica un buen contragolpe que le darán muchos puntos fuera de casa. Lo mejor para el Toledo es que ha vuelto a entrar entre los cuatro primeros de la tabla de este grupo XVIII de la Tercera división. Un puesto que da derecho a disputar la liguilla de ascenso a Segunda división B.