El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha aprobado este martes una inversión de cerca de cinco millones de euros para garantizar el correcto funcionamiento de 180 depuradoras de Castilla-La Mancha.
Según ha informado en nota de prensa la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, esta medida beneficiará a más de 430.000 habitantes y permitirá que las aguas residuales de 192 municipios de las cinco provincias se devuelvan limpias a los ríos y a las zonas húmedas de las cuencas del Tajo, Guadiana, Júcar, Segura y Guadalquivir.
En este sentido, el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, ha explicado que se trata de prorrogar la labor que desarrollan estas instalaciones por las empresas contratadas para este fin hasta que se publique un nuevo contrato público por parte de Infraestructuras del Agua de Castilla-La Mancha (IACLM).
De esta manera, ha subrayado que es “un paso más dentro de la sensibilidad del Gobierno regional, no solo para preservar el medio ambiente haciendo economía circular del agua sino también para asegurar las condiciones sanitarias de los ciudadanos de la región”.
Medio rural
Estas 180 instalaciones, ubicadas en el medio rural, depuran en la actualidad casi 28 hectómetros cúbicos al año, un volumen que, tras pasar por las instalaciones y el correcto tratamiento, permite verterlas al medio natural ya depuradas.
Martínez Arroyo ha recordado la publicación de la orden del Ministerio de Sanidad en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el pasado 24 de marzo, por la que se considera a los operadores de tratamiento de aguas residuales como un servicio público esencial que, por lo tanto, tiene que seguir funcionando incluso en la situación excepcional actual provocada por el coronavirus COVID-19.
La Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, a través de Infraestructuras del Agua, adscrita a la Agencia del Agua de Castilla-La Mancha, gestiona y mantiene en la región 234 estaciones depuradoras de aguas residuales para tratar de manera adecuada los vertidos de 266 poblaciones con un total de más de 460.000 habitantes beneficiados.
