Las principales instituciones de Castilla-La Mancha, el Palacio de Fuensalida, las Cortes y la Delegación del Gobierno, así como numerosos ayuntamientos y diputaciones, han acogido este mediodía concentraciones silenciosas para condenar la violencia hacia las mujeres, con motivo de la conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres.
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha encabezado la concentración y el minuto de silencio ante la fachada del Palacio de Fuensalida tras el acto institucional en el que se ha rendido un homenaje a las trabajadoras de los centros de acogida por su atención a las mujeres víctimas de la violencia machista y sus hijos especialmente en los momentos de más dificultad por el confinamiento durante la pandemia de coronavirus.
Las Cortes de Castilla-La Mancha, con su presidente Pablo Bellido al frente, y representantes de los grupos políticos y de los trabajadores, se han sumado al minuto de silencio de todas las instituciones en el país con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, en señal de repulsa de la violencia machista.
El delegado del Gobierno de España en Castilla-La Mancha, Francisco Tierraseca, ha presidido el minuto de silencio guardado ante la Delegación en homenaje y recuerdo de las víctimas de la violencia machista, acompañado por la coordinadora de las Unidades contra la Violencia de Género, los máximos responsables de la Guardia Civil y la Policía Nacional en la región, el subdelegado del Gobierno en Toledo y personal de la Delegación del Gobierno.
“Un problema de toda la sociedad”
El representante del Gobierno Central en Castilla-La Mancha ha destacado que “este no es un problema personal y familiar sino que afecta a toda la sociedad en su conjunto” y ha aprovechado la conmemoración del 25N para hacer un “llamamiento a la unidad política, a la unidad social, frente a la violencia de género, porque solo si hay unidad podremos acabar con ella”, ha afirmado.
Diputaciones y numerosos ayuntamientos se han sumado a esta iniciativa, como el de Toledo, donde tras el minuto de silencio se ha leído un manifiesto, dedicado este año a “todas las mujeres en situación de riesgo de sufrir violencia de género que quedaron confinadas con su maltratador durante el estado de alarma” y también a las mujeres víctimas de explotación sexual, ya que “muchas fueron abandonadas a su suerte en clubes y pisos por sus explotadores”.
Los sindicatos CCOO y UGT han realizado también concentraciones silenciosas en homenaje a las mujeres asesinadas.