Castilla-La Mancha levantará el toque de queda y el cierre perimetral cuando termine el estado de alarma el 9 de mayo, ha anunciado el presidente regional, Emiliano García-Page, quien ha explicado que este sábado la comunidad tomará medidas para seguir luchando contra el coronavirus pero que tendrán que ser “infinitamente más relajadas”.
Page ha lamentado que el Gobierno de España no mantenga un mes más el estado de alarma, con lo que en la lucha contra el virus quedan al frente las comunidades autónomas pero sin ese “paraguas”, ha dicho durante el acto de poner la primera piedra del nuevo centro de salud de Cifuentes (Guadalajara).
Ha explicado que los servicios jurídicos de la Junta les “han invitado” a no mantener el toque de queda porque “no lo ven con alcance jurídico constitucional”, al tiempo que ha recordado que también termina el cierre perimetral de la región vigente desde el pasado 30 de octubre.
Para Page, va a ser un fin de semana “complicadísimo” con el fin del estado de alarma, ya que ” los que estamos al frente de la pandemia, y con más soledad que nunca, vamos a tener que luchar con una sensación de impotencia extraordinaria” puesto que había un “torniquete efectivo y ahora hay que echar mano a tiritas para parar la hemorragia”.
“Que para defender nuestro derecho a salvar vidas vamos a tener que pleitear con los jueces es una cosa verdaderamente difícil de razonar”, ha dicho el presidente castellano-manchego, quien ha añadido que no obstante, “si mañana se despeja este escenario, sin tener que estar en una tortura judicial” podrían valorar el toque de queda.
Un deseo
Ha deseado que a partir de que termine el estado de alarma no se desencadene una nueva ola de contagios.
“A partir del domingo, sin paraguas, cruzaremos los dedos para que no haya una nueva ola y nos encomendaremos a la prudencia de los ciudadanos”, ha dicho Page, quien ha pedido a la gente seguir manteniendo la distancia social, la mascarilla y la higiene de manos, porque si no, puede haber una nueva ola dentro de la campaña de vacunación que va muy bien.
Este jueves, ha apuntado, se administraron casi 30.000 vacunas, un nuevo récord, y hoy mismo ya empiezan a ser citadas personas de entre 50 y 59 años; además, el 83 % de la población de castilla-La Mancha de más de 60 años ya ha recibido al menos una dosis.
El presidente castellano-manchego ha anunciado también para el próximo jueves una “cumbre” entre las comunidades de Castilla-La Mancha, Castilla y León y Aragón en torno a la despoblación para pedir que las zonas colindantes a las que ha declarado la Unión Europea se puedan beneficiar también de ayudas y estímulos económicos.