El Colegio de Médicos de Toledo (COT) rechaza el actual modelo de adjudicación de plazas MIR de las pruebas selectivas 2020, contemplado en la reciente resolución de la Dirección General de Ordenación Profesional del Ministerio de Sanidad.
El COT se posiciona en contra de las decisiones adoptadas, “de forma unilateral”, por las autoridades sanitarias.
Así lo ha destacado la organización colegial toledana en una nota emitida este sábado, en la que señala que, aún entendiendo la situación especial creada por la pandemia, “no es de recibo que el equipo ministerial de la espalda a la opinión del colectivo de profesionales MIR (Médico Interno Residente) y de los que tienen obligaciones docentes e implemente un modelo que no va a garantizar una elección justa y con garantías para todos los aspirantes a plaza”.
En este sentido, coincide con el Consejo General de Colegios de Médicos en señalar que “convertir un proceso de elección de plazas en una adjudicación por lista impide al candidato conocer el número de plazas disponibles, genera desconcierto, inseguridad y falta de transparencia”.
Asimismo, incide en que el sistema de elección que incluye presentar una larga lista de preferencias (más de 7000, clasificadas y ordenadas por hospital y/o especialidad), y la posterior adjudicación telemática de plazas en un único día “no garantiza los mismos derechos que anteriores convocatorias”.
El Colegio de Médicos de Toledo, que ha priorizado su acción en la defensa, protección y acomodo de los médicos en formación especializada a su nueva realidad profesional, respalda las peticiones de los MIR a la autoridad sanitaria de que, “en el caso de que se produzcan cambios en el modelo de acceso a las nuevas plazas, se hagan de forma escalonada, justa y garantista, a fin de que se les permita reflexionar sobre sus nuevos destinos”.
También rechaza la falta de tiempo para prepararse para el nuevo destino profesional, con solo dos semanas tras la elección, al considerar que “aboca a la precipitación e improvisación y a un mayor número de renuncias, lo que podría generar un grave perjuicio para el Sistema Nacional de Salud, que va a repercutir directamente en el proceso asistencial y docente”.