El presidente de Castilla-La Mancha , Emiliano García-Page, ha defendido que esta región “no duda de su identidad” y en la medida en que le importa España y forma parte de ella ha manifestado: “No me voy a callar nunca y siempre alzaré la voz para defender nuestros intereses legítimos al amparo de la norma democrática”.
Así lo expresado García-Page en su discurso en el acto institucional del Día de la Región, en Guadalajara, donde ha dicho que si esos intereses se ven “cuestionados o amenazados fuera de la región por otras o por algunos colectivos que, aunque reclamen sus intereses, lo hacen para atacar los de los demás”, levantará su voz incluso “con más motivo”.
El jefe del Ejecutivo castellanomanchego ha incidido en que cada Día de la Región defiende “lo nuestro” y eso es España, el conjunto del país “en su diversidad” y la “unidad de fondo” demostrada durante la pandemia de la covid-19.
En este sentido, ha deseado que de la situación actual salgan “todos juntos” y que cuando no haya pandemia “podamos seguir con el mismo espíritu de reacción conjunta y unánime” que han tenido, a su juicio, todos los presidentes autonómicos durante la crisis sanitaria, en la que ha precisado que no ha conocido “a ningún presidente, ni del PP ni independentista, que haya frivolizado”.
Como ejemplo de unidad, García-Page ha agradecido el gesto de la Comunidad vecina de Madrid que -ha dicho- este lunes por la noche iluminará su sede principal con “los colores de Castilla-La Mancha”.
“Razonable actualidad”
Además, el presidente regional ha presumido de la “razonable estabilidad” de la que goza la comunidad autónoma que dirige, la cual ha destacado que es necesaria para avanzar aunque “hay quien puede no quererla y buscar el caos”.
A su modo de ver, la estabilidad “comporta previsibilidad y certidumbre” y contribuye a aprovechar y acelerar la recuperación y, en los momentos difíciles, porque es “el presupuesto elemental de la unidad y de la reacción inteligente”.
Esta estabilidad, ha añadido, computa como el “sentido común” en su doble consideración, en la del sentido de la sensatez y en lo que respecta a lo común, para buscar el acuerdo y el pacto y para “no tener ningún conflicto de identidad”.
“Nos levantamos y acostamos con la misma seguridad de lo que somos”, ha reiterado al tiempo que ha defendido que “Castilla-La Mancha importa pero lo primero es la gente” enmarcada en un territorio que es España, porque “si somos autonomía es porque somos españoles”, ha remarcado.
El acto ha finalizado con el himno de España, con el cual García-Page ha indicado que siempre se “emociona” y que le gusta, por lo que Castilla-La Mancha “no tiene himno ni se lo ha planteado nunca”, ha concluido.