El Gobierno de Castilla-La Mancha ha decidido no modificar la normativa covid con vistas a la celebración de las fiestas navideñas y, por tanto, no ha aprobado ninguna restricción que pueda afectar a la hostelería, las empresas o la movilidad.
Así lo ha anunciado este miércoles el presidente regional, Emiliano García-Page, durante un acto con empresarios en el Palacio de Fuensalida, en Toledo, donde ha comunicado esta noticia “con mucha prudencia”, si bien ha dicho que se reserva “un 1 por ciento de duda por si hay una sorpresa a la vuelta de los días”.
No obstante, ha insistido en que si las cosas siguen yendo como van, esta comunidad autónoma no tomará ninguna decisión normativa aunque “eso no quiere decir que la barrera está levantada para todo, ya que hay restricciones como el uso de la mascarilla y la distancia social”, ha enfatizado.
García-Page ha defendido que el Gobierno autonómico ha tomado esta decisión “por coherencia”, ya que si ha sido una región que ha exigido mucho en los peores momentos de la pandemia, “tenemos no que premiar pero sí ayudar por el esfuerzo de la ciudadanía y de todo el sistema sanitario y el sector económico empresarial”.
Tranquilidad y prudencia
Con todo, ha reiterado que si la situación se complicara “habría que verlo”, al tiempo que se ha mostrado convencido de que Castilla-La Mancha podrá asumir “con bastante tranquilidad y prudencia” las fiestas navideñas y que el comportamiento de la gente en esta región permite decir “con confianza” que “no es necesario modificar ni alterar la normativa”.
“Serán con mascarilla, pero tienen que ser felices fiestas”, ha manifestado García-Page, quien también ha recordado que en el pico de la pandemia hubo quienes acusaban el Ejecutivo regional de “prohibicionista” y de “impedir a las empresas salir adelante”, y ha criticado que son los mismos que “ahora están recomendando que se suspendan todas las cenas de Navidad”.
Ha resaltado que Castilla-La Mancha es la comunidad autónoma que tiene en la actualidad la menor tasa de incidencia de la covid-19 del conjunto del país, que sigue teniendo el mismo número de rastreadores y que hay “una legión de gente vacunando” y, de hecho, se ha referido al inicio de la vacunación infantil “casi al gusto del consumidor” y con la presencia de la ministra de Sanidad, Carolina Darias, porque a su modo de ver “entiende que el modelo de vacunación de esta región es el más universal y comprensivo”, ha concluido.