La Consejería de Sanidad ha establecido, al menos hasta el día 17, la suspensión de las salidas de los mayores de las residencias por una duración menor de siete días y en todo caso al regresar deberá hacerse una prueba.
La Consejería de Sanidad ha publicado este lunes, en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha, una resolución que añade este aspecto a las medidas dictadas el pasado 29 de diciembre para los centros, servicios y establecimientos de servicios sociales.
De esta forma, quedan suspendidas las salidas en residencias de mayores de una duración menor de siete días y durante esa salida se deberán extremar las precauciones y la persona “deberá permanecer en un entorno estable”.
Además, a su vuelta al centro deberá realizarse una prueba, según establece la resolución, que tiene efectos desde este lunes y hasta el 17 de enero de 2022.