La Real Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Talavera de la Reina ha vivido este fin de semana pasado una intensa agenda espiritual, cofrade, artística y cultural en el ya tradicional viaje anual de hermandad.
El destino de este año ha sido Sevilla y El Rocío, en Huelva; y el motivo, retomar las relaciones que se remontan a siglos atrás con la Primitiva Hermandad de los Nazarenos de Sevilla Archicofradía Pontífica y Real de Nuestro Padre Jesús Nazareno, Santísima Cruz en Jerusalén y María Santísima de la Concepción.
Su secretario segundo, Rafael Roblas, acompañó a los hermanos nazarenos compartiendo la historia de la Primitiva y haciendo entrega al hermano mayor de la Corporación nazarena talaverana, Javier Guayerbas, de un antiguo grabado de Nuestro Padre Jesús Nazareno.
El grupo también participó en el Año Jubilar de la cofradía hermana de la Hermandad Sacramental de la Esperanza de Triana, donde visitó el museo y tesoro devocional de esta cofradía de la ‘madrugá’ sevillana, con las explicaciones de su director, Ignacio Sánchez.
Otra parada cultural y espiritual tuvo lugar en la aldea onubense de El Rocío, con la visita guiada por Manuel Galán al tesoro de la Virgen. El viaje de hermandad ha contado un año más con la compañía de Irene Gallardo en la visita cultural y cofrade al Convento del Santo Ángel de Padres Carmelitas Descalzos y a la Hermandad de los Gitanos, siendo otras de las vivencias de esta nueva experiencia nazarena.