Como ocurrió el Viernes de Dolores y también en la procesión de La Borriquita, también en la tarde del domingo la climatología fue protagonista del programa procesional de la Junta de Cofradías talaverana. Esta vez la amenaza de la lluvia ha provocado algunos cambios en su desarrollo, pero no ha imposibilitado que un año más se fundan la tradición religiosa y la capitalidad comarcal de Talavera.
Junto al Cortejo de Mondas, el otro gran momento del año en el que esta ciudad plasma su íntima vinculación con los pueblos del entorno tiene lugar en la tarde del Domingo de Ramos. Bajo el título ‘La Pasión del Señor en la comarca de Talavera’, las calles de esta ciudad han acogido una procesión formada por doce pasos, once de ellos llegados desde otros tantos pueblos, algunos de allende los límites geográficos de las Antiguas Tierras de Talavera, pues en esta ocasión se ha sumado la Cofradía del Cristo del Olvido, de Fuensalida, además del Cristo Amarrado a la Columna de La Puebla de Montalbán.
El resto de localidades presentes han sido Calera y Chozas (La Oración en el Huerto), Santa Olalla (Cristo de Medinaceli), Santa Ana de Pusa (Virgen Dolorosa), Las Herencias (La Vera Cruz), Parrillas (Virgen de la Soledad), Velada (Virgen de los Dolores), Segurilla (Santo Sepulcro), Pepino (Virgen de los Dolores) y Los Cerralbos (Cristo Resucitado).
Como representante local y cruz de guía, abría el solemne cortejo el Cristo del Mar, crucificado que el próximo año estrenará cofradía propia, la de Los Estudiantes.
Para evitar posibles problemas con la lluvia, el acto diocesano previo a la puesta en marcha de la procesión no se celebró en la plaza del Pan, sino en el interior de la Colegial, desde donde partieron las distintas imágenes rumbo a un itinerario muy recortado del previsto, pues únicamente giraron en torno al templo a través de la plaza del Pan y calles Teatro y Gabriel Alonso de Herrera. Pese a ello, numeroso público acudió al encuentro de un conjunto de imágenes que escenificaban los momentos más significativos de la pasión, muerte y resurrección de Cristo.
