El Consejo de Gobierno ha destinado 19 millones de euros para apoyar los centros residenciales de mayores, de los cuales 17 millones son para residencias de las corporaciones locales y los otros dos millones como “ayuda extra” para los centros que han tenido un gasto superior al previsto por la pandemia de coronavirus.
La consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, ha comparecido junto con la consejera de Igualdad y portavoz del ejecutivo regional, Blanca Fernández, tras la reunión del Consejo de Gobierno extraordinario de este lunes.
Sánchez ha explicado que el objetivo de la primera convocatoria es el mantenimiento de plazas residenciales, viviendas de mayores y centros de día que el Gobierno Regional gestiona en colaboración con los ayuntamientos.
Se podrán financiar 3.000 plazas residenciales en 235 centros, de las que casi mil plazas serán en 49 residencias, 1.500 plazas en 155 viviendas de mayores, más de 500 plazas en centros de día y además dará cabida a financiar actividades en centros de mayores y programas de envejecimiento activo.
La segunda de las partidas, de dos millones de euros, va destinada a subvencionar el aumento de los gastos en residencias de personas mayores como consecuencia de la Covid-19.
La titular de Bienestar Social ha explicado que “como consecuencia de las medidas establecidas para garantizar la seguridad de las personas usuarias en los centros residenciales, éstos han soportado un aumento significativo en sus costes ordinarios que debieron asumir con una rapidez extrema”.
Ayudas para 328 residencias
Por ello, un total de 328 residencias podrán concurrir con ayudas que podrán llegar a los 9.200 euros para contribuir a los gastos causados por el Covid-19.
Esta partida económica está destinada a colaborar con: la contratación extraordinaria de personas y trabajadores de refuerzo o sustitución por las bajas producidas por enfermedad, la adquisición de equipos de protección individual, la adquisición de material de protección sanitario, labores de desinfección y la formación a trabajadores y usuarios en prevención de contagios.
Aurelia Sánchez ha argumentado que estas ayudas contribuyen al mantenimiento del sector residencial porque “las residencias han tenido la obligación de seguir abiertas, contar con personal suficiente y sin la posibilidad de realizar ERTE u otras ayudas económicas ya que han tenido la consideración de servicios esenciales. Sin embargo, no han podido realizar ningún tipo de nuevos ingresos, salvo los derivados de hospitales, hasta el final del estado de alarma”.