El Gobierno de Castilla-La Mancha activará en fase de alerta, a las 18:00 horas de este sábado, el Plan Específico ante el Riesgo por Fenómenos Meteorológicos Adversos (Meteocam) en toda la comunidad autónoma.
La activación de este Plan se llevará a cabo por las previsiones desfavorables realizadas por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), que prevé lluvias localmente intentas en distintos puntos de Castilla-La Mancha durante todo día de hoy, especialmente por la tarde, informa el Gobierno regional.
La AEMET ha previsto avisos amarillos por acumulación de lluvias que podrían llegar hasta los 40 mm en doce horas en casi toda la región y esta cifra podría duplicarse en las comarcas del Valle del Tajo, Sierra de San Vicente y Montes de Toledo, en la provincia de Toledo a partir de la tarde, motivo por lo que los avisos de la Agencia son de nivel naranja para estas zonas.
Como consecuencia de la activación del Plan Específico ante el Riesgo por Fenómenos Meteorológicos Adversos, desde el Servicio de Atención y Coordinación de Urgencias y Emergencias 112 se ha procedido a informar a los ayuntamientos, diputaciones provinciales y a los grupos de intervención en emergencias, para que puedan establecer las medidas de prevención, seguimiento y respuesta que estimen oportunas, ante esta situación.
Tras poner en marcha el Meteocam en nivel de alerta, desde el Servicio de Emergencias 112 se ha dispuesto un seguimiento permanente de todos aquellos incidentes que puedan ocurrir en la comunidad autónoma, en relación con las lluvias.
La activación de este Plan Específico de Protección Civil se enmarca dentro de la acción integral del Gobierno de Castilla-La Mancha por ofrecer de forma coordinada, y mediante la optimización de los recursos, una respuesta planificada ante cualquier situación de emergencia.
Ante esta situación, se recomienda ante una lluvia muy intensa en la carretera, reducir la velocidad, adaptándose a la visibilidad existente; evitar pasar por tramos inundados, cauces o ramblas y, si se va a pie en el campo, buscar lugares elevados ante la posibilidad de una inundación.
Con respecto a las lluvias copiosas, retirar de la vivienda los elementos exteriores que puedan ser arrastrados por el agua, y si se inunda parte de la casa, abandonar sótanos y plantas bajas y desconectar la energía eléctrica.
En el exterior, durante una fuerte lluvia o tormenta hay que evitar estacionar el vehículo o vadear con él arroyos o cauces, para evitar ser arrastrado por una súbita crecida de agua, por lo que hay que alejarse de vaguadas, ríos o torrentes para evitar ser sorprendidos por una riada.
Finalmente se deben evitar los desplazamientos por carretera y, si es necesario hacerlos, informarse de las condiciones meteorológicas de la zona a la que se dirige y extremar las precauciones por la posible presencia de obstáculos en la vía.
