El Ayuntamiento de Toledo ha expresado su indignación por lo que considera una nueva agresión del Ejecutivo estatal al principal recurso natural de Toledo con una derivación de agua de 20 hectómetros cúbicos cuando la situación de cabecera es dramática.
Para el equipo de Gobierno, el Tajo encierra unas posibilidades de desarrollo y crecimiento que están siendo esquilmadas por las políticas trasvasistas, coartando así las posibilidades socioeconómicas de los toledanos, que ven las condiciones lamentables que trae el agua a diario a su paso por la capital de Castilla-La Mancha.
Y sostiene que el segundo trasvase en menos de dos meses confirma el maltrato del Gobierno de España a los pueblos ribereños y a la ciudad de Toledo, esquilmando el río Tajo a pesar de que los embalses de cabecera se encuentran al 18 por ciento de su capacidad.
El Gobierno local condena esta nueva agresión al Tajo y vuelve a reclamar la unidad de todas las administraciones, entidades e instituciones que trabajan en la defensa del río. En este sentido, recuerda que el Ayuntamiento no deja de tomar medidas en su ámbito competencial y en el marco del Pacto de la Ciudad de Toledo por el Tajo.
Iniciativas de concienciación, información, formación, actuaciones en el entorno del río como en la Senda Ecológica y la puesta en marcha del colector del Aserradero, con el adecentamiento del paseo, muestran la preocupación del Ayuntamiento por la calidad del río, aunque el Gobierno local es consciente de que esas medidas son insuficientes en tanto en cuanto se mantenga el trasvase, verdadera razón del desastre medioambiental que supone el río Tajo a su paso por Toledo.
