Una pareja, con domicilio en la calle Trinidad de Talavera, encerró en una habitación de la vivienda a sus hijos pequeños, de 2 y 4 años, para irse al recinto ferial de Talavera donde se celebraba el último día de las Ferias de San Isidro.
Los hechos ocurrieron el pasado lunes entre las 6 de la tarde y las 10 de la noche. Fueron los vecinos los que ante los llantos de uno de los niños alertaron a la policía.
Los agentes desplazados tuvieron que forzar la puerta de entrada a la casa para descubrir que los pequeños estaban encerrados en una habitación con pestillo. Uno de ellos presentaba signos de deshidratación, por lo que fue atendido por los servicios sanitarios desplazados.
Sobre la medianoche se personaron en la vivienda la madre y su pareja. Según refiere la Delegación del Gobierno, lo hicieron con claros síntomas de embriaguez, por lo que fueron detenidos y acusados de abandono de menores.
La Fiscalía del Menor decretó ayer martes la retirada temporal de la custodia a la madre y encargar a los Servicios Sociales de Castilla-La Mancha el cuidado de los niños.