La decisión de seguir al frente del CF Talavera una temporada más parece haber dado fuerzas al presidente, José Antonio Dorado, que no se ha cortado a la hora de tomar su primera decisión: renovar a Fran Alcoy.
Ayer noche se reunía con el técnico alicantino y le confirmaba que afrontará su segunda campaña como técnico blanquiazul en Segunda División B, donde tan brillantemente ha ascendido el equipo desde Tercera bajo sus directrices por segunda vez.
Sin embargo es sabido que desde hace años existen muchas notas disonantes sobre el entrenador y ese rechazo de parte de la afición blanquiazul caló y pesó en el ánimo de Dorado para anunciar, como ahora se constata, precipitadamente su adiós. Ante esas desavenencias, el presidente, ora por activa y por pasiva ora en petit comité y públicamente, ha declarado estar encantado con la labor del técnico al que no culpó tras el descenso de categoría de hace ahora un año.
Los apoyos apalabrados con las administraciones, que recientemente han tendido la mano para apoyar a la entidad en su nuevo periplo en categoría nacional, parecen que pueden pesar más que esa oposición que ya ha comenzado a expresarse a través de las redes sociales por cuanto no son partidarios de ver en el banquillo de su equipo a un entrenador del que dicen no sabe sacar partido a los planteles que ha tenido a su disposición y con el que auguran un nuevo calvario del club en la categoría de bronce del fútbol español.
Si de algo no ha adolecido nunca Dorado es de valentía y de ir a muerte en sus convicciones. El tiempo dirá si está en lo cierto.