Ha quedado en libertad con cargos el conductor que fue detenido en Bargas este lunes después de protagonizar una persecución policial por calles de Toledo y la A-42 (Toledo-Madrid).
Se le acusa de ser el presunto autor de un atentado a la autoridad, un delito que se tendrá que concretar durante la instrucción judicial, según han señalado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha.
El conductor, un ciudadano lituano que fue detenido por la Policía Nacional, pasó este miércoles por la tarde a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Toledo, que estaba de guardia. Tras tomarle declaración, la jueza suplente dejó en libertad al detenido. El caso pasará ahora al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Toledo, que estaba de guardia cuando sucedieron los hechos.
Cuatro fueron los delitos que atribuyó la Polícia Nacinonal. Uno de desobediencia, otro de atentado a agentes de la autoridad, uno más por la sustracción del vehículo y un cuarto por falsedad documental, ya que el automóvil tenía las placas de matrícula de otro vehículo.
Dicho conductor, que cuenta con antecedentes policiales, protagonizó una persecución que se inició el lunes en el Casco Histórico de la capital regional unos minutos después de las ocho y media de la tarde. Logró huir a pesar de que la Policía Local y la Policía Nacional intentaron detenerlo.
Incluso un agente estuvo a punto de ser arrollado por el vehículo conducido por el lituano, un Volkswagen Touareg de color negro que había sido robado en Denia (Alicante) y tenía las placas de matrículas falsas. Dos horas más tarde, fue detenido por la Policía Nacional en Bargas.