La presidenta del PP de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, ha anunciado este viernes que “ha llegado el momento de ceder el testigo” en la Presidencia del partido a nivel regional, y ha asegurado que ha sido una decisión “dura” que toma por “lealtad” a Castilla-La Mancha y a sus compañeros de partido.
Cospedal, que ha presidido la Junta Directiva Regional del PP esta mañana en Toledo para convocar el Congreso extraordinario en el que se elegirá el nuevo líder de la formación en la comunidad autónoma, ha confiado en que quien salga elegido lleve de nuevo al Partido Popular a gobernar la comunidad.
Con la voz quebrada, la todavía presidenta del PP regional ha reconocido que “no ha sido fácil” tomar la decisión de no continuar al frente del partido, y aunque ha enumerado todos los cargos que ha ostentado desde que empezara a liderar la formación regional hace doce años, ha dicho: “Lo más importante y lo que más ha llenado mi corazón ha sido ser la presidenta del partido en Castilla-La Mancha”.
En un discurso en el que se ha emocionado en varias ocasiones, en las que ha recibido el aplauso de sus compañeros de filas, ha rememorado el momento en el que se puso al frente del PP de Castilla-la Mancha y ha afirmado que “doce años es apenas un suspiro en la historia de un pueblo pero mucho en un proyecto vital”.
Ha agradecido el apoyo “sin reservas ni cautelas” recibido a lo largo de más de una década, en la que ha celebrado que “entre todos” ofrecieron “un nuevo comienzo, una nueva forma de estar en política y de gobernar”, y sobre todo -ha recalcado- “la posibilidad de saber que en Castilla-La Mancha no estamos condenados y no es una maldición bíblica que nos gobierne PSOE y Podemos”.
“Lealtad”
“Mi lealtad, convicción y amor por Castilla-La Mancha siguen intactos”, ha subrayado, y en cuanto al proceso de cambio que se abre en el partido a nivel regional ha reconocido que produce “vértigo” pero se ha mostrado convencida de que el PP está “absolutamente preparado para asumir este proceso de transición del que saldrá reforzado”, ha vaticinado.
A sus compañeros de partido les ha pedido que sean “leales” y que “no se dejen manipular” ante la oportunidad que “verán algunos” de dividir el partido, y ha mostrado su disposición de ayudar a quien le sustituya y de seguir defendiendo las ideas de la formación pero ya no como presidenta ni como candidata en las próximas elecciones autonómicas, ha confirmado.
También ha pedido a su sucesor o sucesora “generosidad y mucho esfuerzo”, que tenga siempre en cuenta que “hay que aprovechar todo el talento” y, sobre todo, que “un partido no se dirige con amiguismos”.
“Yo voy estar como una más, ese tiene que ser mi papel, sin estorbar y para sumar y defender al mejor partido, a la mejor gente y a nuestra tierra”, ha manifestado.
Una tierra en la que cree que el PP tiene la oportunidad de “devolver un Gobierno serio” para afrontar una situación económica que, ha augurado, “va ser peor que la de hoy”, así como de presentar un programa “ilusionante y realista” en favor de la creación de riqueza y empleo y de una mejor calidad de vida acompañada de una mejor situación fiscal.
“Somos los mejores”
“Creo firmemente que ganaremos”, ha señalado Cospedal en relación a las próximas elecciones autonómicas de 2019, y no solo porque el PP ha ganado todas las elecciones en Castilla-La Mancha desde las europeas de 2009, sino porque “somos los mejores” -ha dicho- y por un proyecto de futuro para la región “que ningún partido político ha sido capaz de enarbolar ni antes ni después de nosotros”.
Según Cospedal, “no se ganan elecciones con el piloto automático y por la inercia, sino con espíritu de victoria, convicciones y principios”, y ha sentenciado que “el horizonte vital de Castilla-La Mancha está unido a las siglas del PP”.
En este punto, ha definido al Ejecutivo castellanomanchego como “un Gobierno de perdedores, apático, anclado en el pasado, inexistente en los problemas reales y dedicado exclusivamente a colocar amigos y a hacer propaganda”, ha lamentado.
Tras la Junta Directiva reunida hoy, ha quedado convocado el congreso extraordinario que el PP de Castilla-La Mancha celebrará en Albacete el 7 de octubre y para el que ya hay un precandidato, el presidente del PP de Albacete, Francisco Núñez.
Además, otros dos miembros del PP castellanomanchego -el alcalde de Guadalajara, Antonio Román, y la vicepresidenta tercera del Congreso, Rosa Romero– han anunciado que sopesan presentar sus candidaturas, por lo que todo hace prever que se celebrarán primarias para elegir al sucesor de Cospedal.
