Mientras todavía siguen los trabajos a pie de calle y la instalación del mobiliario urbano, en la mañana de este miércoles está previsto que las Asociaciones de Vecinos La Alameda y Puerta de Zamora registren en el Ayuntamiento una petición conjunta instando al Gobierno Municipal a que arbitre las medidas necesarias en pro de la seguridad de viandantes y conductores en las remozadas plaza del Reloj y calle Corredera del Cristo. En concreto, se solicitará como acción urgente la presencia continuada en las horas de mayor afluencia de la Policía Local con el fin de “informar a la gente, regular el tráfico” y, en definitiva, “poner un poco de orden en la zona”.
Arturo Espinosa, presidente de la A.VV La Alameda, explica a Ahoraclm que, a pesar de acumular más de dos meses de retraso respecto a la fecha en la que inicialmente estaba prevista la finalización de las obras ejecutadas por el Ayuntamiento, ambas vías “parece que se hayan abierto al tráfico apresuradamente sin estudiar la distribución adecuada ni las consecuencias, lo que está generando un descontrol”.
Para los representantes vecinales de ambos barrios, la distribución del tráfico no sólo sería “muy confusa” para los conductores, sino que además se estarían produciendo situaciones de riesgo tanto para éstos como los viandantes.
Como ejemplo, se refiere al hecho de que a pesar de que en todas las entradas figure la señalización de zona de preferente uso peatonal, la ausencia de regulación específica en puntos como la confluencia de la calle San Francisco supone “un gran peligro para muchas personas que a diario cruzan hacia la calle Arco de San Pedro y viceversa”.
Igualmente, Arturo Espinosa relata que, como consecuencia de la presencia de los bolardos y de los estacionamientos, “he sido testigo como los autobuses están teniendo problemas para acceder a la plaza debido al poco espacio de que disponen”.
En última instancia, el presidente de La Alameda también lamenta que el espacio situado junto a las murallas haya sido convertido de nuevo en un aparcamiento, abogando porque este entorno se utilice para el encuentro y el esparcimiento ciudadano.
