Un vecino de Santa Olalla de 72 años de edad ha fallecido en el Hospital General Nuestra Señora del Prado tras ingerir presumiblemente alguna especie venenosa de amanita mezclada con otras que sí son comestibles. En esta ocasión de nada han servido los conocimientos y la experiencia del fallecido ni las recomendaciones lanzadas al inicio de la campaña de recogida de hongos por el Gobierno de Castilla-La Mancha para evitar este tipo de riesgos.
El hombre acudió el miércoles día 14 al centro hospitalario presentando síntomas de intoxicación. Según refería a los facultativos, había estado recogiendo setas en el campo para cocinarlas posteriormente y ya sospechaba del posible error cometido en la identificación de algunos de los ejemplares, produciéndose la muerte el pasado viernes.
Este suceso ha provocado gran conmoción en Santa Olalla, donde el fallecido había trabajado en La Higueruela, finca experimental gestionada por la Junta de Comunidades.
